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Todos necesitamos un cambio en un momento dado, pero a veces ese cambio debe hacerse en un plis plas, sino nos quedamos con la sensación de que estamos cambiando pero sin avanzar casi por no ponerle empeño.

En ocasiones tenemos una sensación o simplemente una corazonada, ves que se necesita un cambio o que necesitas un cambio, y sabes que debes hacerlo, lanzarte en ese nuevo rumbo. Muchos te dirán que debes esperar, que a lo mejor debes cambiar poco a poco pero sólo tú sabes porque necesitas un giro, sólo tú sientes que debes hacerlo. A lo mejor incluso, si te pones a pensarlo razonadamente piensas que quedarte como estás no está nada mal, pero por dentro tus impulsos siguen latiendo en otra dirección.

Una oportunidad es sólo un momento propicio para algo. Y yo añadiría: sólo puedes verlo tú. Tal vez te salga bien o por el contrario salga mal, pero… arrepentirse es demasiado peso para uno.

En los cambios el 80% es incertidumbre, el 20% sólo puede ser trabajo e ilusión. Dedícate al cambio, si de verdad lo necesitas. El trabajo y la ilusión harán que esa incertidumbre se gire a tu favor. Así que, porque no intentarlo?. Intentarlo no significa hacerlo, la acción viene después de la intención. Puedes intentarlo, pero te vas a quedar en el camino.

Sólo queda un paso, porque no convertir tu idea en realidad?. Sólo va a depender de ti, recibirás miles de impedimentos, pero a medida que te estés planteando el cambio surgirán señales. Haz caso de eso, déjate llevar, al final lo agradecerás.